Como he recalcado en muchos de mis artículos, es muy poco recomendable hacer uso tanto de redes Wifi gratuitas como de USB públicos. No obstante, es lógico pensar que en muchas ocasiones estaremos obligados por las circunstancias a utilizarlos. En este artículo voy a explicar como podemos tener conexiones seguras en USB y Wifi públicas.
En la actualidad es complicado concebir nuestra sociedad o el mundo empresarial sin la transmisión de datos de forma instantánea. Al disponer de información cada vez más delicada y sensible en nuestros terminales, debemos siempre plantarnos si existe seguridad en nuestras conexiones a las redes Wifi que nos rodean. Debemos hacernos el mismo planteamiento cuando utilizamos USB para cargar nuestros teléfonos móviles en cualquier parte no controlada.
¿Cómo funcionan este tipo de conexiones?
Las redes Wifi, como su nombre completo en ingles nos indica (Wireless Fidelity). Esto define a ciertas señales de radio que nos permiten conectar cualquier terminal a la red sin necesidad de utilizar ningún tipo de cableado.
Por otra parte, los USB (Universal Serial Bus), son conectores que permiten la conexión de distintos periféricos a un terminal, ya sea un smartphone, una Tablet, etc…
Podemos encontrar redes Wifi gratuitas y cargadores USB públicos en bibliotecas, restaurantes, aeropuertos, Hospitales, etc… Suelen ser lugares con un tránsito importante de gente.
Las estaciones de carga con puertos USB, se han extendido a un ritmo exponencial. Esto es debido a que los usuarios cada vez necesitan más acceder a internet y como consecuencia, las baterías de sus terminales necesitan de constante carga.
Reducir riesgos y conseguir conexiones seguras en USB y Wifi públicas
Como hemos comentado, los usuarios pueden tener graves problemas de seguridad así como accesos no deseados a su información y datos personales derivados de la utilización de este tipo de conexiones abiertas.
Es por ello qué con algunos consejos, podemos minimizar o evitar ciertas amenazas a las que se enfrentan nuestros dispositivos.
Estas amenazas son las siguientes:
- Malwares: A través de este tipo de redes, puede introducirse en nuestros dispositivos malwares o softwares maliciosos. Estos pueden provocar robos de datos de nuestros terminales entre otros problemas.
- Conexiones a redes Wifi fraudulentas: este tipo de redes se crean con la intención de ser idénticas a las redes auténticas o legítimas. Suelen utilizar el nombre de locales de la zona en cuestión para no levantar sospechas y conseguir su cometido. De esta forma, un usuario puede conectarse a estas redes con los riesgos que esto conlleva.
- Video Hacking: Mediante este proceso, un delincuente puede ver lo que el usuario en cuestión está haciendo en todo momento y en tiempo real con enchufes modificados o redes Wifi fraudulentas.
- Infección de nuestro dispositivo: Al conectarnos a este tipo de redes abiertas o conectores USB, podrían infectar nuestro dispositivo.
- Equipos intermediarios: Un posible delincuente podría configurar su propio equipo para que este haga de intermediario de una comunicación entre nosotros y cualquier tipo de servicio (redes sociales por ejemplo), pudiendo modificar o incluso eliminar la información que está siendo intercambiada.
Consejos para proteger nuestros equipos
A continuación, voy a enumerar algunos consejos elementales para poder evitar posibles problemas de seguridad inalámbricos o en los mencionados cargadores USB públicos.
- Utilizaremos siempre nuestro propio cable de carga. Actualmente existen cables y pendrives que pueden ser maliciosos.
- El antivirus: Es altamente recomendable contar con un antivirus como si de nuestro PC se tratara.
- Debemos analizar la zona de carga USB. Deberemos comprobar que esta no ha sufrido manipulación alguna. En caso de la más mínima duda, nunca debemos utilizarla.
- Utilizaremos patrón o contraseña en nuestro teléfono móvil. Si decidimos cargarlo en un puerto USB público, no debemos desbloquearlo. De esta forma podemos evitar que puedan copiar el PIN o el patrón de desbloqueo de nuestro terminal.
- Debemos actualizar nuestras aplicaciones de forma frecuente. Nuestro software y aplicaciones deben estar actualizados constantemente. De esta forma son menos vulnerables.
- Si tienes la posibilidad, instala un cortafuegos. Un firewall o cortafuegos en un software que bloquea el acceso de usuarios no autorizados y posibles malwares. Esto no obstante no es sencillo para usuarios no familiarizados con el proceso.
- Utiliza una red VPN. Esto nos permite ocultar toda nuestra actividad en la red. También se bloquea nuestra localización entre otras cosas.
- Wifi desactivada si no la necesitamos. Aún que no nos hayamos conectado a una red directamente, nuestro hardware de conexión inalámbrica sigue transmitiendo datos con las distintas redes dentro de su entorno. Es recomendable que, si no estamos conectados mantengamos nuestro Wifi desactivado. De esta forma además alargamos la batería de nuestro dispositivo.
- Apagar el uso compartido. Cuando nos conectamos a la red en una zona pública y no nos encontramos compartiendo datos, podemos desactivar el uso compartido de datos en las preferencias del sistema de nuestro dispositivo.
- Solo accede a sitios web que utilicen el protocolo HTTPS. Este protocolo nos garantiza que la información transmitida entre nuestro dispositivo y el sitio web visitado disponga de cifrado en su transmisión.
Aún que parezca evidente la mejor solución es salir de nuestro domicilio con la batería de nuestros terminales cargada del todo. De esta forma evitaremos la tentación de utilizar cualquier tipo de cargador USB público.
No obstante, es importante recalcar que, incluso las personas que se toman en serio todas las precauciones de seguridad existentes para este tipo de redes y conexiones USB públicos, se encuentran alguna vez con incidencias o problemas. Por ello, no es sencillo que nuestras conexiones USB y wifi públicas sean seguras al 100 %.