El objetivo principal de la gestión de la seguridad en urbanizaciones es tener un control efectivo de las personas que circulan por sus viales y controlar quien accede a cada uno de los domicilios.
Residir en una urbanización residencial con casas unifamiliares o chalets aporta una comodidad muy elevada. Esta comodidad o relax a su vez, expone a los residentes de estas zonas a distintas problemáticas relacionadas con la seguridad que requieren tomar distintas medidas conjuntas para poder evitar posibles robos en las viviendas.
Los chalets en zonas residenciales se han convertido en un objetivo muy atractivo para la delincuencia profesional. Esto ocurre por que son fáciles de vulnerar y siempre encuentran recompensa.
El compromiso principal de los propietarios es esencial para poder acreditar a los individuos y vehículos a los que ellos autorizarán la entrada al conjunto de su urbanización.
El control de los vehículos que accedan a la zona residencial, disminuye enormemente el posible acceso de desconocidos. Como consecuencia directa a esto se reducen todos los incidentes delictivos en la urbanización.
A su vez debemos instalar un eficaz sistema de barreras con acceso solo para personas autorizadas. Esto crea una protección elemental frente a posibles asaltos y robos sin disminuir comodidad a los vecinos.
Elementos principales a tener en cuenta
Las urbanizaciones residenciales normalmente dan lugar a:
- Redes de viales y calles con tránsito reducido, sin peatones ni vehículos
- Fincas o parcelas aisladas con poco contacto entre vecinos
Estos dos factores facilitan enormemente el movimiento de individuos y personas con intenciones delincuenciales ante la situación de anonimato que se produce.
El objetivo más importante que tenemos es disuadir al delincuente. Para conseguirlo no hay nada mejor que incomodarle con medidas que dificulten su acción.
A su vez estas medidas deben trasladarle sensaciones que se perciban como un riesgo a ser visto, oído y detenido.
El robo se produce con racionalidad, inducido por el coeficiente de oportunidad, atractivo y vulnerabilidad que ofrece nuestro entorno (referido a vecindad), el tipo constructivo de la vivienda (piso alto, bajo, ático, chalet adosado o individual) y nuestra actividad (de hábitos y laboral).
Para construir la seguridad por diseño tecnológico aplicamos una técnica llamada defensa en profundidad.
Esta técnica consiste en crear anillos de protección que dificulten el avance del agresor, consiguiendo retrasar su acción, incluso llegar a interrumpirla.
Control perimetral y control de accesos en la seguridad de las urbanizaciones
La solución en materia de seguridad para poder tener un control total de las personas que se mueven por las calles y viales de la urbanización en cuestión, a la vez de quien accede a cada domicilio existente en la comunidad, es disponer de un control de accesos que funcione de forma eficaz. Esto se consigue de estas dos formas:
- Tener un control total del perímetro de la urbanización residencial para evitar así el acceso por zonas no autorizadas.
- Tener en los accesos de la urbanización un control eficaz.
No obstante, previamente por parte de la urbanización y la comunidad de propietarios de la misma, debemos adoptar las medidas siguientes:
- En primer lugar, es esencial realizar el cerramiento de todo el perímetro de la urbanización en cuestión.
- Establecer puntos de acceso a la urbanización según la extensión de esta y sus necesidades. Debemos tener en cuenta como premisa que, a menos zonas de acceso más facilidad de centralización de los mismos y mayor facilidad de control.
- Debemos determinar el protocolo a establecer en nuestro control de accesos. Es imprescindible que todos los propietarios colaboren en una correcta gestión del mismo por parte del servicio de seguridad.
Por otra parte, la gestión de la seguridad en urbanizaciones residenciales con una gran cantidad de domicilios y personas que acceden a las mismas no resulta sencilla.
Debemos tener en cuenta que el personal de seguridad que lleve poco tiempo de servicio en nuestra urbanización llegue a tener un control total de todos los vehículos y personas.
Es por esto que normalmente, lo más eficaz es disponer de otras soluciones de seguridad que complementen y completen la eficacia del personal de seguridad. La mejor forma es mediante la obtención de datos que, en caso de ser necesarios puedan ser utilizados como posible prueba de un delito.
Las medidas a implementar en la gestión de la seguridad en urbanizaciones
A continuación procederemos a detallar algunas de las medidas o soluciones recomendadas a implementar para poder proporcionar una eficaz gestión de la seguridad en urbanizaciones residenciales:
- En lo que se refiere al cerramiento perimetral de la urbanización, dependiendo de si es un cerramiento completo o se complementa con los muros de las propias fincas, debe optarse por un tipo de vallado seguro que impida el escalamiento o la rotura del mismo con facilidad. En caso necesario las fincas o parcelas deben adoptar unas determinadas características para poder impedir el acceso a personal no autorizado.
- Es esencial complementar tanto la vigilancia interior como la perimetral con una distribución estratégica de cámaras de seguridad. Estas grabarán y darán apoyo al personal de seguridad en la vigilancia del recinto de la urbanización. Así podrán corroborar que quien accede se dirige donde dice ir.
- En los puntos al recinto deberemos hacer distinción entre el que acceda a pie o el que lo haga mediante un vehículo.
- Para el acceso de vehículos se deben incluir barreras automáticas, lectores de matrículas y obstáculos escamoteables.
- En el caso del acceso a pie podemos implementar distintos tipos de tarjetas de identificación si fuera necesario. Estableceremos distintos niveles dependiendo si se trata de visitas, servicios o trabajadores o los mismos propietarios.
- En ambos tipos de accesos se establecerá la captación mediante cámaras de seguridad.
Es imprescindible, además de las medidas de seguridad expuestas y basándose en lo que se estipule por parte de los propietarios de la urbanización, que se establezcan los protocolos a seguir en cada caso, como por ejemplo:
- Pre-autorización de posibles visitas, trabajadores o servicios.
- Acompañamiento por el personal destinado a la seguridad en casos determinados.
- Comprobación de cargas, personas y vehículos.
- Rondas y patrullas por el interior de la urbanización para controlar posibles individuos no identificados.
- La colaboración y coordinación con servicios de protección de personas que puedan disponer determinados propietarios en algunos casos.
Otras consideraciones
Es esencial que los propietarios complementen la seguridad de la urbanización, con su compromiso con la misma para poder ejercer una correcta acreditación de las posibles visitas y servicios.
Un aspecto imprescindible que no debe olvidarse y debe tenerse en cuenta en cualquier plan de seguridad.
Debemos disponer de información relevante para una protección relevante y correcta de la urbanización.
Otra gran opción es para aumentar la seguridad de nuestros domicilios es implementar un perro. Si quieres ampliar información sobre los perros de vigilancia en los domicilios puedes leer este artículo al respecto.