En este artículo voy a intentar resumir los diferentes modos de programación del fuego y las consecuencias de un incendio, tras explicar en otro artículo anterior los conocimientos básicos sobre el fuego. Existen tres formas de propagación de un incendio y en consecuencia, del calor y son las siguientes:
Por Conducción: Se transmite a través de un cuerpo sólido cuando existe variación de temperatura entre distintos puntos del mismo. Cuanto mayor sea la diferencia de temperatura más calor se transmitirá.
Si el extremo de una barra de hierro lo aproximamos a la lumbre, en breves instantes, el otro extremo comenzará a calentarse. Esto ocurre con materiales que conducen muy bien el calor, como son los metales. A estos materiales se les denomina conductores. Sin embargo, existen otros materiales como la madera, el hormigón, la cerámica, etc., que presentan un comportamiento totalmente distinto debido a que transmiten muy mal el calor.
Por Convección: Se denomina a la transmisión del calor a través del movimiento de fluidos. El aire caliente asciende hacia las capas superiores de un recinto. Por ello, si se incendia un piso de una planta, el humo tiende a canalizarse y ascender por el hueco de las escaleras hacia las plantas superiores propagando el incendio hacia las mismas.
Por Radiación: El calor se transmite sin ningún medio o soporte material a los elementos colindantes a través de ondas electromagnéticas.
En un día de verano, con un sol radiante, si colocamos una lupa junto a un papel podemos conseguir que se prenda. Ello es debido a la radiación térmica que es la transmisión de calor sin soporte material por ondas procedentes del sol. En el caso de un fuego, las llamas emiten radiaciones a las superficies colindantes, consiguiendo que comiencen a arder.
Las consecuencias de un incendio
Las consecuencias de un incendio se pueden sentir sobre el ser humano, sobre los edificios y sobre el medio ambiente. Veamos en detalle cada una de ellas.
Las consecuencias de un incendio sobre el ser humano
Las Consecuencias de un incendio relacionadas con humos y gases
La primera causa de muerte debido a un incendio es por los humos y gases desprendidos. Pueden presentar los siguientes peligros:
- Temperatura elevada (abrasamiento por inhalación de gases a altas temperaturas).
- El humo provoca el lagrimeo de los ojos dificultando la visión, lo cual unido a su opacidad dificulta la evacuación e intervención posterior.
- Bajada en la concentración de oxígeno que es causa de asfixia.
- Gases asfixiantes simples: El principal es el dióxido de carbono. Este gas, en concentraciones del 10% en aire, da lugar a cefaleas y vértigo, y a partir del 20% a narcosis. Además al aumentar su concentración aumenta el ritmo respiratorio y con ello la inhalación de gases tóxicos.
- Gases tóxicos: El monóxido de carbono, además de combinarse con la hemoglobina de la sangre desplazando al oxígeno, produce un efecto tóxico especial- mente importante en el cerebro. Da lugar en concentraciones en el aire del 0.01% a dolores de cabeza, que pasan a vértigo y al final al coma, seguido de la muerte a partir de 0.2%. Resaltar dentro de estos gases también el cianuro de hidrógeno, resultante de la combustión de materiales plásticos y fibras naturales que contienen nitrógeno, el sulfuro de hidrógeno, que se produce en la combustión incompleta de las materias orgánicas que contienen azufre (cauchos, neumáticos, lanas…) y el cloruro de carbonilo, que se produce por el contacto de las llamas sobre los productos de PVC, aislamientos de cables eléctricos, materiales refrigerantes como el freón, etc. Existe además otro efecto de los gases que se suele pasar por alto. Se trata del producido por aquellos gases, especialmente el ácido clorhídrico, que pueden anular la acción de mecanismos de activación de alarmas al producir cortocircuitos en la transmisión entre los semiconductores presentes en los sensores.
Hay que indicar que el color del humo que se genera durante un incendio es orientativo sobre la composición del mismo. Por ejemplo, un color negro opaco es debido a la combustión de hidrocarburos, alquitranes, gomas, etc. La madera, el papel, materiales textiles, cartón, etc. al arder, desprenden un humo poco denso y de color gris. Y si estos elementos están mojados, la combustión empeora y da lugar a un humo negro
Las consecuencias de un incendio relacionadas con las llamas y el calor
Si tenemos en cuenta la curva normalizada de temperaturas de un incendio, el aire alcanza una temperatura de 500 ºC en menos de 10 minutos. En recintos cerrados el calor se estratifica normalmente de arriba hacia abajo, con un gradiente ascendente según se aumenta de cota. Este aumento de calor puede provocar importantes daños al organismo, llegando a resultar en algunos casos mortales.
Las llamas están formadas por gases incandescentes con temperaturas que varían entre 600 y 1200 ºC y que producen quemaduras inmediatas por la desnaturalización de las proteínas del organismo. Del mismo modo, las quemaduras pueden tener lugar por contacto con superficies calientes. La importancia de la quemadura (extensión, intensidad y profundidad) dependerá de la temperatura, del tiempo de contacto y de la naturaleza del material. Según su naturaleza, además, se producen llamas de distintos colores que, en ciertos casos, son característicos. Por ejemplo, el color amarillo-anaranjado se corresponde con la presencia de sodio en la atmósfera. Llamas de color azul evidencian la presencia de alcoholes o gas natural. El color blanco indica que arden metales finamente divididos o sales de metales alcalinos. Tonalidades verdosas amarillentas, cloro o compuestos hiperclorados. Verde, sales de cobre y algunos nitratos. El rojo suele indicar presencia de líquidos inflamables.
Simplemente por proximidad a un incendio, sin contacto con una llama o superficie alguna, las quemaduras pueden aparecen en menos de 3 a 10 minutos. Hay que tener en cuenta que las temperaturas medias que se desarrollan como consecuencia de un incendio son del orden de 50 ºC en menos de 2 minutos y de 200 ºC en menos de 4 minutos después del comienzo del mismo. Además, el efecto luminoso de las llamas constituye además un peligro para los ojos.
Se distingues tres categorías de quemaduras: De primer, de segundo y de tercer grado. Las de primer grado son de carácter superficial, las de segundo grado destruyen la epidermis, llegando a la mitad de la dermis y las de tercer grado penetran en todo el espesor de la piel destruyendo el tejido y pudiendo llegar incluso hasta el hueso. Existen también las quemaduras de cuarto grado, con daños en músculos y huesos, pero suelen presentarse en quemaduras por frío extremo y congelación.
Consecuencias de un incendio relacionadas con desplomes de estructuras
En pocos minutos tras iniciarse el fuego, el calor disminuye la resistencia mecánica de las estructuras con riesgo de desplome de todo o parte de los edificios. Esto puede afectar no sólo al personal que no haya sido evacuado para entonces, sino también a los equipos de intervención.
Consecuencias sociales y económicas
Por último no debemos olvidar que un incendio de un establecimiento comercial o industrial puede dar lugar a una paralización temporal de la actividad o, en el peor de los casos, al cierre definitivo como consecuencia de las pérdidas ocasionadas, con lo que todo ello puede conllevar en cuanto a consecuencias sociales se refiere. Además de estas pérdidas económicas, hay que tener en cuenta la pérdida de reputación como consecuencia de la contaminación y al efecto producido en el entorno próximo al edificio.
Las consecuencias de un incendio sobre los edificios
La destrucción de los edificios y de todos los elementos presentes en ellos supone una de las consecuencias más importantes de un incendio. Para conocer cómo proteger un edificio contra el fuego es necesario tener en cuenta su poder calorífico (la cantidad de energía que la unidad de masa de materia puede desprender al producirse el incendio) así como el comportamiento contra el fuego de los materiales utilizados en su construcción, los elementos decorativos y los auxiliares (reacción y resistencia al fuego).
Consecuencias de un incendio sobre el medio ambiente
Hay que ser consciente que un incendio representa una amenaza para el medio ambiente del establecimiento que lo sufre (población, fauna, flora, etc.) aumentada por el efecto de los productos utilizados en la extinción del fuego (en el aire, por los gases de combustión tóxicos y/o corrosivos y en el agua y el suelo ocasionados por los productos resultantes de la combustión y por la utilización de productos extintores).